domingo, 1 de julio de 2018

Tenemos nuevo chico en la oficina: cambio en la SGAD


De todos es conocido que desde el pasado Sábado a los TICs de la AGE nos han (im)puesto nuevo jefe. Digo nos han (im)puesto, porque como es habitual en las Administraciones Públicas, en el proceso de selección no se ha contado con los afectados (que no solo somos los TICs). Y no me estoy refiriendo a que se contase con nuestra opinión, que las Administraciones Públicas no se caracterizan por su carácter asambleario. Me refiero a que se hubiera abierto un proceso abierto y transparente de selección de candidatos en base a su CV y el proyecto que propusieran. Como he repetido muchas veces, el no seguir esas directrices no implica que el candidato elegido carezca de méritos suficientes para desempeñar el puesto. Pero si que le deslegitima ante el resto de la AGE, sobre todo cuando en los proyectos que venga a emprender aparezcan dificultades.

En todo caso, tenemos una nueva persona que detentará el máximo puesto TIC de la AGE, puesto que no me atrevo a llamarlo CIO, porque no lo es si tomamos como referencia las competencias de los CIOs en el sector privado (puesto de relevancia en el Comité de Dirección de la organización, dirección de todas las TIC y los puestos TIC de la organización, capacidad para modificar la estrategia organizativa tanto en lo que tiene que ver con el negocio como con la organización interna, por poner solo unos ejemplos claros). ¿Cual serán sus prioridades en estos dos años de legislatura? Ya que hasta ahora no teníamos una hoja de ruta pública, y dado que dudo que la tengamos, me aventuro a poner un par de alternativas sobre la mesa:

domingo, 20 de mayo de 2018

Programa electoral de urgencia. S.O.S Administraciones Públicas


En mayo de 2019 volveremos a ser llamados a las urnas con el objetivo de escoger de entre las alternativas políticas que se presenten, aquellas que nos gobernarán durante los siguientes cuatro años. Desde el punto de vista de la ciudadanía, la relevancia del proceso se resume en la palabra "gobernar", acción que, según la segunda entrada de la RAE asociada al término en cuestión, se describe como "dirigir un país o una colectividad política".

Sin embargo, desde el punto de vista de las organizaciones políticas que concurren a la competencia electoral, uno tiene la impresión de que compartan ese objetivo. Cada vez más se acentúan los síntomas, y queda fuera del alcance de este artículo el análisis de las causas, todo ello sin perjuicio de la relevancia del asunto, que nos hacen pensar que los partidos políticos diseñan su programa electoral con el único ánimo de conseguir el mayor número de apoyos, sin prestar atención a las situaciones que tendrán que afrontar cuando ocupen la responsabilidad de gobernar.