El techo de las TIC y su valor social

Complemento al título: una vez conseguido un Subsecretario, ahora queremos un Secretario de Estado.

Siguiendo con el análisis del valor de las TIC en las sociedades modernas, y como continuación a las consecuencias de considerarlas disruptivas en cualquier ámbito, me gustaría realizar algunas consideraciones sobre el valor político de las TIC.

De un tiempo a esta parte, la economía se ha hecho fuerte en las sociedades avanzadas, de forma que no hay gobierno que se precie de "moderno" que no tenga alguna vicepresidencia económica. Cualquier iniciativa llamada a ser relevante dentro del programa de gobierno, tiene que tener la autorización del responsable económico de tuno. Incluso en ocasiones, el correspondiente presidente no se fía mucho del responsable económico y tiene muy cerca lo que se ha venido a llamar la Oficina Económica del Presidente del Gobierno, de forma que pueda tener una visión menos contaminada y más independiente.

Supongo que como, y siguiendo al clásico (sin mencionarlo, ya que escandalizaríamos a más de uno), la política no es más que economía concentrada, el ser más político de todos como lo es un presidente de gobierno, tiene que tener alguien de confianza que le enseñe (en algo más que en dos tardes) las verdades ocultas económicas, para después dedicarse a manejar la economía a través de la política.

¿Las TIC son disruptivas en cualquier ámbito?

Uno tiende a pensar que si, que visto lo visto, las TIC aplicadas a cualquier ámbito producen una disrupción tal que cambian la actual estado de las cosas para constituir uno nuevo. Por poner ejemplos sencillos:

• Internet de las cosas: ¿nos imaginamos cómo va a ser nuestra relación con los objetos que usamos en el día a día cuando todo aquel de un coste superior a ¿100€? lleve un sensor?
• ¿Cómo cambiarán muchos usos/profesiones actuales cuando tengamos por doquier coches sin conductor o mecanismos de financiación en los que las entidades bancarias no tengan nada que decir?
• ¿Cómo afectará a las empresas el que cada individuo sea un competidor de su producto (alquiler de habitaciones por particulares, aparca en mi garaje cuando yo no estoy en casa, ...?

Claramente, hay ámbitos o sectores que intentan ser refractarios a la influencia de las TICs, instaurando barreras y consiguiendo retrasar un corto periodo de tiempo esa influencia. En otras ocasiones, en la mayoría, el único efecto de obviar la influencia de las TICs es ignorar la realidad (a veces criminalizándola), intentando crear  una burbuja espacio temporal donde creen vivir a salvo.