Estando de vacaciones me encuentro con un titular sabroso Industria cree que la impunidad fiscal de las firmas de Internet compete a Bruselas.
La verdad es que es desazonador. En estos tiempos de crisis donde, teóricamente, se busca y rebusca un euro para poder cubrir los servicios públicos mínimos indispensables, resulta que un máximo responsable político decide que él no puede hacer nada para evitar esta sangría a la que nos someten las grandes plataformas de ventas por internet. ¡Pregunté usted en Bruelas! nos dicen. Pues para este viaje no necesito alforjas, que diría aquel. Lo mínimo que tenía que haber hecho era, por lo menos, cubrir el expediente y decir que ve injustificable tales hechos y que va a hablar en Bruselas para dar una solución al tema. Si no, ¿cómo vamos a pretender que las plataformas españolas de ventas por internet tributen en suelo español? Sería de tontos no hacer lo mismo que las Apple, Google y compañía. No solo por tener mayores beneficios, únicamente por la búsqueda de ser competitivas y seguir viviendo tendrían que hacerlo.