Tras el socialismo o barbarie (R.Luxemburgo. 1916), 100 años después lo podemos enunciar como TICs o barbarie (como paso previo al socialismo, claro, no se me enfaden los teóricos)
Verdaderamente vivimos en una época más que revolucionaria en cuanto a la influencia de las TICs en el día a día. No es necesario ni siquiera poner algunos ejemplos que ilustren la frase anterior, ya que todos tenemos en la mente la última noticia leída o escuchada en medios generalistas (y menciono estos medios para hacer más patente la ubicuidad de la revolución) acerca de la última gran innovación, uso o cambio de paradigma.
Quizá el último reducto en la que las TICs no han entrado como un elefante en una cacharrería es en el de las teorías sobre los modelos políticos. Y claramente no lo han hecho por falta de tecnología o alternativas (luego volveremos sobre ello), si no porque todo sistema político tiende a perpetuarse lo máximo posible, extendiendo su "reinado" incluso más allá de lo razonable (ya lo decía El Roto en su viñeta diaria: "Si no queréis protestas, tendréis revueltas").